Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura participa en la organización de este evento, que tendrá lugar en marzo
El etiquetado de origen comunitario, la comercialización e importaciones y los problemas fitosanitarios en el cultivo del arroz son algunos de los aspectos que centrarán el Congreso Internacional de Arroz, que se celebra los días 13 y 14 de marzo en Don Benito (Badajoz), dada la relevancia de este cultivo en Extremadura.
No en vano, es la segunda región productora de arroz, sólo superada por Andalucía, en la que este año se cultivaron algo más de 23.600 hectáreas, el 22% de la superficie nacional dedicada a este cultivo, dando una producción de unas 148.600 toneladas de arroz cascara, este año más bajas de lo habitual, fundamentalmente por las difíciles condiciones climatológicas de la campaña.
El Congreso Internacional de Arroz está organizado por Feval, Junta de Extremadura, ayuntamiento de Don Benito, Mesa del Arroz de Extremadura, Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura y distintas empresas patrocinadoras del evento, en el que expertos nacionales e internacionales expondrán estudios de nuevas variedades y tecnologías aplicadas al cultivo del arroz, como medidas para combatir la baja rentabilidad del sector.
De este modo, abordarán asuntos tan importantes como el etiquetado de origen comunitario, demanda sobre la que el sector está trabajando como herramienta de defensa de la calidad del origen de este producto frente al auge del las importaciones arroceras asiáticas, principalmente procedentes de Camboya, India, Pakistan, Tailandia, Guyana o Birmania. Estos países actualmente aprovechan la oportunidad que les brinda la UE en la exportación sin coste arancelario.
También se debatirá sobre la comercialización e importaciones, pues el escenario actual del sector arrocero obliga a evaluar la puesta en marcha de medidas de salvaguardia a importaciones de terceros países y futuras negociaciones de acuerdos comerciales. Los ínfimos costes de producción de los países importadores, unidos a la inexistencia de normativa medioambiental o fitosanitaria en estos terceros países, hace que los arroces europeos no sean competitivos en los mercados, pues la UE es cada vez más exigente en aspectos medioambientales restringiendo el uso de materias activas para combatir las malas hierbas, mostrándose éstas cada vez menos eficientes y aumentando los costes de producción.
Los problemas fitosanitarios en el cultivo del arroz serán así otro de los temas que se traten, dada su indudable relevancia para disminuir los altos costes del cultivo, aumentar las producciones y hacer más rentables las explotaciones arroceras. Único registro europeo, autorización de nuevas materias activas y usos excepcionales, serán algunas de las cuestiones de debate.
Se trata, en definitiva, de una oportunidad para que todo el sector pueda conocer de primera mano la situación mundial del arroz y distintas experiencias de las diferentes regiones arroceras europeas.