La federación aplaude la subida del Salario Mínimo Interprofesional y trabaja en diversas medidas para facilitar a agricultores y ganaderos la aplicación de esa subida
Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura ha comenzado ya a trabajar en diversas medidas que permitan a los agricultores y ganaderos asumir las dificultades económicas por la actualización de los sueldos al aplicar, como están haciendo ya, la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI).
Y es que la entrada en vigor del Real Decreto 1462/2018, de 21 de diciembre, por el que se fija el Salario Mínimo Interprofesional para 2019, publicado en el BOE el 27 de diciembre, supone una subida del 22% con respecto al SMI del año 2018, quedando establecido en 42,62 euros por jornada, en 900 euros al mes y en 12.600 euros al año.
Esto implica una actualización de los sueldos que estén por debajo de dichos importes, así como una subida de las cotizaciones a la seguridad social.
Ante ello, Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura está trabajando con otras federaciones de cooperativas en el seno de Cooperativas Agro-alimentarias de España en medidas como solicitar al Ministerio de Trabajo el pago escalonado de ese incremento en los costes en Seguridad Social que supondrá la subida del SMI para las explotaciones agroganaderas.
Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura considera que si el incremento se produjese de forma gradual se permitiría a ciertas actividades del sector agroalimentario asimilar sin tantas dificultades la subida de la masa salarial, ya que no se tiene la posibilidad de incrementar estos costes en los precios de los cultivos.
Entre estos cultivos cabe destacar el sector de la fruta, en el que los costes de la mano de obra suponen un 70% de los costes totales de una explotación, que se verán incrementados en aproximadamente un 20%. A esta situación hay que añadir los altos costes de transportes que asumen los fruticultores extremeños para acercar sus producciones a las zonas de consumos, haciendo todo ello que se pierda competitividad.
Otro sector que se puede ver muy afectado es el del tabaco, inmerso en una crisis de precios, ya que los costes están por encima del valor de la producción y el incremento en Seguridad Social supondría un coste de 5 céntimos por cada kilo de tabaco.
Finalmente, hay que hacer referencia a la negociación en que se encuentra actualmente el Convenio del Campo de Extremadura por parte de las organizaciones agrarias y los sindicatos de trabajadores, a los que se insta desde Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura a establecer un convenio que recoja las condiciones laborales más optimas posibles, compatibles con la rentabilidad y productividad que precisan las explotaciones agrícolas y ganaderas de Extremadura y permitiendo así el crecimiento de producciones generadoras de empleo que fijen población en los pueblos sin que sea necesario el abandono de cultivos sociales por cultivos mecanizados.
