"Las cooperativas agroalimentarias tienen una importancia tremenda desde el punto de vista social y económico"

ENTREVISTA. Florentino Tienza Villalobos, presidente de Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura

Recientemente ha sido nombrado presidente de Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura ¿Con qué ánimos afronta este nuevo cargo?

Con los mejores ánimos. Con una ilusión tremenda y con una responsabilidad mayor aún. Creo firmemente en el cooperativismo y espero que esta nueva etapa sirva de unión para todos. Trabajaré con seriedad y fuerza para alcanzar consensos, para representar al cooperativismo extremeño y para defender aquello en lo que creo.

¿Qué grandes objetivos o retos se plantea?

Mi principal reto ahora es que el movimiento cooperativo extremeño continúe teniendo la representación y profesionalidad que ostenta del sector agrario y ganadero de Extremadura. Y esto dentro del afán que siempre me ha movido en toda mi trayectoria cooperativa: defender aquello en lo que creo, que es el mundo rural y las cooperativas. Luchar, en definitiva, por Extremadura.

¿Cómo se desarrolló la asamblea?

Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura es la federación que aglutina a prácticamente todas las cooperativas agrarias y ganaderas de la región. Y todas estuvieron representadas en la asamblea general que celebramos a principios de julio. Se desarrolló con la misma normalidad que todos los años. Se dio cuenta de todo lo realizado durante el año pasado, proyectos, reivindicaciones, logros... y de todos lo que se está haciendo ya, que es mucho.

¿Cuáles son algunos de esos proyectos en los que se está trabajando ya?

Hemos puesto en marcha un servicio de auditoría en las instalaciones de carburantes en las cooperativas; estamos desarrollando desde hace años un servicio de asesoramiento a las explotaciones; hemos firmado un convenio para la optimización del consumo eléctrico en las cooperativas; estamos coordinando la campaña oficial contra la pudenta del arroz; estamos desarrollando un fuerte plan de formación y capacitación de agricultores, ganaderos y trabajadores de cooperativas; hemos puesto en marcha la segunda edición de un concurso gastronómico para potenciar los productos de las cooperativas en el sector de la restauración; trabajamos en la reforma de la ley de sociedades cooperativas de Extremadura;... e infinidad de proyectos más.

Hablemos sobre cooperativismo ¿Cuál es el papel de las cooperativas? ¿Qué han aportado al campo extremeño?

Las cooperativas agroalimentarias tienen una importancia tremenda desde el punto de vista social y económico: vertebran la región y son la única empresa que existe en muchos pueblos; han modernizado el sector; están tirando económicamente de Extremadura en estos momentos difíciles; tienen un fuerte compromiso con las zonas rurales y con el medio ambiente; han mejorado la vida de agricultores y ganaderos, garantizando su renta; han favorecido la incorporación de jóvenes al campo; reducen los intermediarios en la cadena alimentaria;...

En definitiva las cooperativas han hecho que el sector agroalimentario sea el primer sector económico de nuestra región, de España y de Europa.

¿Hacia dónde debe caminar entonces el cooperativismo en Extremadura?

A potenciar la calidad que ya tenemos y a aumentar la competitividad. Tenemos las materias, podemos garantizar la trazabilidad y la seguridad alimentaria que el consumidor demanda cada vez más, contamos con productos de una alta calidad... Sólo nos queda apostar por ello y avanzar en la comercialización de nuestros productos, que gozan ya de esa calidad, para quedarnos con el valor añadido, y crecer, tener mayor tamaño y ser más competitivos.

¿Cuáles son los retos actualmente del cooperativismo?

Por un lado, comercializar más. Es un reto que ya está prácticamente superado. Hace años tuvimos como reto transformar las materias primas con las que contamos. Y lo conseguimos. Las cooperativas son ya empresas agroalimentarias que transforman esa materia prima en productos igualmente de una calidad excepcional. Estamos ya en la camino de ese reto de comercializar y salir al mercado directamente. Hay innumerables cooperativas que exportan sus productos y otras que están además innovando con ellos: el licopeno, el fiambre de cordero, nuevos envases para el vino o la venta de productos ibéricos ya loncheados, entre otros.

Y un segundo reto muy importante es la intercooperación para así tener mayor tamaño y, con ello, ser más competitivos.

Es obligada esta pregunta ¿Qué opina de la integración cooperativa?

Es ahora mismo nuestro gran desafío. Que nuestras cooperativas ganen tamaño, porque es algo que está directamente relacionado con ser más productivos, más competitivos, mejorar la capacidad de negociación, que para nosotros es muy importante, asegurar la calidad y trazabilidad de los productos... Todo ello depende de nosotros los primeros, pero también son necesarias medidas concretas de apoyo a las fusiones, como existen en otros países europeos, donde ha habido un importantísimo proceso integrador.

¿Por qué es tan necesaria la integración cooperativa?

Entendemos que la única manera de poder salir de la actual situación de recesión económica es a través de estructuras productivas agroalimentarias fuertes que puedan influir en la cadena de valor de los productos con los que opere, y la forma de llegar a ello es a través de fórmulas de colaboración entre las diferentes cooperativas. Concentrar la oferta frente a una distribución tremendamente concentrada ya. Es lo único que nos dará más competitividad.

¿Se están dando pasos?

Sí, claro. La integración cooperativa es un hecho ya. Hay múltiples ejemplos de integración real. Las más recientes se han dado en el sector ganadero, que es el que tradicionalmente ha estado menos integrado. Por ejemplo, en el sector del vacuno, por ejemplo, recientemente se ha creado una cooperativa de segundo grado, Bovies, que integra a tres grupos cooperativos extremeños y uno andaluz. Y que arroja ya excelentes cifras de resultados en los pocos meses que lleva funcionando, facturando entre abril y mayo casi 2 millones de euros.

Otro ejemplo se da en el sector ovino, hace ya unos años las cooperativas Oviso y Oviaragon-Grupo Pastores, las dos cooperativas más importantes de carne de cordero a nivel nacional, crearon una nueva sociedad limitada para poner en común la exportación de corderos aprovechando las sinergias de ambas cooperativas.

¿Las cooperativas creen en ello?

Yo creo que sí, que están convencidas de que es el camino de futuro. Pero es un camino que no se recorre en dos días. Se han hecho algunos intentos, como fue la que se dio en llamar "cooperativa única". Visto que esa fórmula no era posible, por el único motivo de que no era operativa, se han probado otras fórmulas y hay multitud de ellas.

Sobre otro tema ¿qué opina sobre la reforma de la PAC?

Estamos ahora mismo en un momento crucial en el debate sobre la reforma de la PAC. Un momento crucial e importante, y de intensas negociaciones, en las que a España le ha tocado liderar la postura de los países del sur frente a la gran presión que han ejercido los del norte.

Queda aún un recorrido importante.

Para las cooperativas, la nueva PAC debe tener una dotación financiera suficiente que vaya acompañada de instrumentos eficaces que prevengan la alta volatilidad de los mercados, que mejoren la comercialización y competitividad de los agricultores, y sus empresas cooperativa. Ningún sector productivo puede quedar fuera, teniendo en cuenta la diversidad de cultivos que tenemos en Extremadura, y eso lo debe contemplar la PAC. Es necesario que la PAC impulse las organizaciones de productores, que se estructure así el sector para reequilibrar la cadena de valor agroalimentaria.

¿Por qué?

Las ayudas de la PAC no son una limosna. El objetivo de la PAC es dar estabilidad a los mercados para abastecer con alimentos sanos y de calidad a todos los ciudadanos. Necesitamos producir alimentos y eso es lo que hacen agricultores y ganaderos. Eso les cuesta un dinero, y los precios que reciben no cubren ese gasto. Son necesarias por tanto esas ayudas para que la agricultura y ganadería continúen siendo viables, o no tendremos alimentos.

Se trata de hacer que la agricultura y la ganadería sean competitivas. Lo que más queremos es recibir precios competitivos por nuestro trabajo.

Hablaba antes de los problemas de financiación...

Las cooperativas no son ajenas a la situación de crisis global. También la están sufriendo. En menor medida que otro tipo de empresas, pero afecta.

En todo ello, algo tienen que ver los bancos y en este sentido, de alguna forma habría que regular los préstamos a intereses abusivos, que es lo que ahora mismo puede ahogar a muchas empresas.

El problema de financiación de las cooperativas es el mismo que el de muchas empresas, con el agravante de que las cooperativas son las que hacen que el sector agrario funcione, si se las sigue ahogando sin conceder préstamos o concediéndolos a intereses tan altos, todo caerá y el campo extremeño acabará parándose.

Pero están aguantando la crisis mejor que otras empresas.

La crisis nos afecta a todos. Pero también es cierto que el sector cooperativo es fuerte. Muy fuerte. Y eso es lo que nos está permitiendo resistir la crisis. ¿Por qué? Pues porque las cooperativas son las empresas de los agricultores y ganaderos, que son los que se están "apretando el cinturón".

Creo que hoy por hoy las cooperativas podemos responder perfectamente a la creciente liberalización del mercado mundial y ganar poder de negociación, frente a la gran distribución, incidiendo además de forma positiva en la cadena alimentaria.

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